Tradición, modernidad y cultura
Carcelén, villa disputada durante muchos años por nobles, condes y señores, cuenta con un amplio patrimonio cultural, histórico y natural que el visitante puede descubrir en su genuina ubicación entre dos grandes montañas.
Pasea por sus calles contemplando sus edificios históricos, saborea la gastronomía popular y déjate llevar por las rutas guiadas de senderismo y de cicloturismo. Te invitamos a adentrarte en sus cuevas y grutas, visitar su imponente Castillo del siglo XIV o tomar un descanso en algunas de sus 40 fuentes naturales.
El mencionado Castillo bien merece nuestra atención. Sito en pleno centro urbano, junto al Ayuntamiento, es conocido también como el castillo del Conde de Casal. Consta de un gran torreón de planta cuadrada reforzado por otros torreones de esquina, que le confieren un aspecto poderoso. Reformado en el XV, ha sufrido modificaciones varias hasta nuestros días, la última hace escasos años, pasando de un estado carencial a otro excelente, donde en la actualidad sirve de sede para la celebración de pequeños actos protocolarios, charlas, reuniones, degustaciones de vino, exposiciones, etc.
En su plaza contigua, explanada de piedra situada en alto, se celebra otros tantos actos más numerosos, como por ejemplo, el Día del Orgullo, a finales de junio, con una repercusión mediática emergente.
Su gran oferta de comercios, restauración, alojamientos rurales y ocio nocturno hace que Carcelén sea sin duda uno de los destinos perfectos para disfrutar en familia, en pareja o con amigos. La identidad, amabilidad, el respeto y la hospitalidad de su gente te enamorará.